“División Palermo” pone en agenda la discapacidad
La serie creada y dirigida por Santiago Korovsky, que estrenó el pasado 17 de febrero en la plataforma Netflix, abrió el debate, generó repercusión y nos invitó a reflexionar sobre la discapacidad.
Pero, ¿de qué trata?, en principio de una guardia urbana integrada -en su mayoría- por personas con discapacidad. Pero, lo que parece una propuesta estatal de inclusión se muestra desde el inicio como una simple estrategia comunicacional, lo que se conoce vulgarmente como una lavada de cara.
Hasta acá una gran apuesta. Sin embargo, la serie no se queda ahí. Aborda, además de la inclusión laboral, la sexualidad de las personas con discapacidad (en particular de las mujeres) y la condescendencia e infantilización a las que son sometidas las pcd.
Saliendo de la ficción, los datos hablan
Desde 1981, en Argentina, contamos con la Ley 22.431, que asegura un cupo laboral de personas con discapacidad en el Estado de un 4%. En su Art. 8° establece que “los entes públicos no estatales, las empresas del Estado y las empresas privadas concesionarias de servicios públicos están obligados a ocupar personas con discapacidad que reúnan condiciones de idoneidad para el cargo en una proporción no inferior al 4% de la totalidad de su personal y a establecer reservas de puestos de trabajo a ser exclusivamente ocupados por ellas…”.
¿Se cumple? Según el informe realizado en febrero de este año por la CGT y su secretaría de Igualdad de Oportunidades, la cifra hoy no se cumple, ya que solo se registra el 0,61% del personal con alguna discapacidad en las plantas permanentes estatales.
A la falta en el cumplimiento del cupo, se suma un dato arrojado por Asdra (Asociación Síndrome de Down de la República Argentina): el 64,1% de las personas con discapacidad están inactivas, y aquellas que están empleadas la mayoría se encuentra en el sector privado.
En la región, las cosas no son muy diferentes. En Latinoamérica el 72,9 % de las personas con discapacidad se encuentra sin empleo. Estos datos fueron obtenidos a través de la Encuesta Latinoamericana sobre Discapacidad (E.LA.Dis), elaborada por la empresa “Incluyeme.com”.
Dentro de los principales motivos de desempleo se encuentra, por un lado, las barreras en el acceso a la educación y, por el otro, desde el sector empresarial se evidencia la falta de capacitación y prejuicios y mitos relacionados a la productividad de las personas con discapacidad.
Además, las personas con discapacidad empleadas ganan entre 6% y 11% menos por el mismo tipo de empleo que otros trabajadores y presentan una tasa de informalidad más alta.
Aquí también se puede observar la disparidad social y laboral de géneros: el 57% de las mujeres con discapacidad en la región están inactivas, mientras que en los varones con discapacidad el porcentaje es del 40%.
Sujetos de derechos y deseos
En sus primeras semanas de lanzamiento, la serie se ubicó entre las más vistas de Netflix. Su éxito en visualizaciones llevó a que en medios de comunicación y redes sociales se hable sobre un sector relegado: las personas con discapacidad.
Las pcd no son seres asexuados, y los derechos sexuales y reproductivos también corren para ellos. En Argentina recién desde diciembre del 2021, ya no se puede esterilizar personas con discapacidad sin consentimiento. La Ley 27.655 establece que todas las personas tienen derecho a brindar su consentimiento para la realización de intervenciones como la ligadura de trompas o la vasectomía, a recibir información en formatos accesibles, a acceder a los apoyos que les permitan consentir en forma autónoma, y a que se adopten salvaguardias para evitar la sustitución en la toma de decisiones.
Los escalones existen
Otro hit de la serie fue el momento en el que se viraliza un video motivacional y de autoayuda que proclama que “los escalones están en tu mente”. Pero Sofía (Pilar Gamboa), la chica que se moviliza con silla de ruedas, deja más que claro que los escalones no están sólo en tu mente, sino que están a diario cuando los accesos para personas con movilidad reducida no existen o se encuentran defectuosos.
Mención en la ONU
Es tanta la repercusión que generó esta serie que llegó a Naciones Unidas. Así es, fue mencionada por el abogado Agustín Ferreyra, representante argentino en el Comité de Discapacidad: “Resulta esclarecedor lo que refleja la serie que hoy es tendencia en plataformas digitales ‘División Palermo’, relativo a la práctica, en este caso estatal, de hacer una mínima concesión de orden simbólico hacia el colectivo de personas con discapacidad sin tener en consideración los reales derechos de fondo vulnerados”.
Para ir cerrando, les compartimos la serie contada por sus protagonistas:
Desde el FORO destacamos estas producciones culturales y la audacia de proponer algo distinto y diverso, como en realidad son las sociedades. Dicen que lo que no se nombra no existe y División Palermo recoge el guante que muchos no se atreven, abordando las problemáticas y barreras con las que transitan su día a día las personas con discapacidad.